Por Christian Marlin
En las dos últimas décadas el Estado ecuatoriano ha gastado cientos de millones de dólares en asistencia técnica, extensión rural y capacitación para pequeños productores, pero en el campo son muy poco visibles los cambios alcanzados. La gran mayoría de los cultivos de banano, arroz, café, cacao, papa, cereales se siguen manejando de igual forma que hace varias décadas; las vacas siguen produciendo sus 4 litros de leche/día y los agricultores dicen estar cansados de recibir talleres de capacitación. Mientras tanto la productividad de los países desarrollados se ha disparado y aún en los países vecinos como Perú y Colombia la productividad promedio ha mejorado sustancialmente.